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Enfermedad de Crohn

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La enfermedad de Crohn es una condición crónica que se caracteriza por presentar alteraciones a nivel del tracto gastrointestinal que afectan su normal funcionamiento.

Estas alteraciones se presentan con mayor frecuencia en la porción inferior del intestino delgado (íleo), aunque pueden ocurrir en cualquier parte del intestino delgado o grueso, estómago, esófago o boca, y son provocadas por diversos mecanismos que incluyen:

  • Inflamación severa: puede llevar al bloqueo del paso de las sustancias que se encuentran en el interior de la porción de intestino afectada.
  • Desarrollo de úlceras: en la mayoría de los casos estas ulceras pueden afectar las capas profundas de la pared intestinal.
  • Malabsorción: pérdida de la capacidad de absorción de nutrientes de los alimentos digeridos.
  • Desarrollo de fístulas: son comunicaciones anormales de una parte del intestino a otra, o del intestino a órganos cercanos como la vejiga o vagina.

    Aunque la causa exacta de la enfermedad de Crohn se desconoce, se ha logrado definir que se trata de una alteración de origen inmunológico en la cual el sistema inmunitario del cuerpo ataca por error a virus y bacterias que se encuentran de forma normal en el intestino, así como a las células propias causando inflamación severa y destrucción del tejido corporal sano.

    Los síntomas varían dependiendo de la parte del tracto gastrointestinal que esté afectada, los pacientes presentan principalmente encías inflamadas, úlceras bucales, dolor abdominal con cólicos, inapetencia, deposiciones dolorosas (tenesmo), diarrea acuosa y persistente o en ocasiones estreñimiento, pérdida de peso, sangrado rectal o sangre en las heces acompañados de fiebre, fatiga, fístulas (generalmente alrededor del área rectal que pueden causar drenaje de pus, moco o heces), inflamación de los ojos, ulceras en la piel, e inflamación y dolor articular. En los niños se presenta deficiencia en el crecimiento y en el desarrollo sexual.

    Las personas con enfermedad de Crohn sufren periodos de síntomas severos seguidos de periodos de remisión que pueden durar de semanas a años. Desafortunadamente, no existe forma de determinar cuándo ocurrirá una remisión o cuándo aparecerán los síntomas.

    Numerosos estudios han demostrado que existen algunos factores genéticos y ambientales que están relacionados con una mayor incidencia de la enfermedad, estos son:
  • Inflamación severa: puede llevar al bloqueo del paso de las sustancias que se encuentran en el interior de la porción de intestino afectada.
  • Desarrollo de úlceras: en la mayoría de los casos estas ulceras pueden afectar las capas profundas de la pared intestinal.
  • Malabsorción: pérdida de la capacidad de absorción de nutrientes de los alimentos digeridos.
  • Desarrollo de fístulas: son comunicaciones anormales de una parte del intestino a otra, o del intestino a órganos cercanos como la vejiga o vagina.
  • Antecedentes familiares: cerca del 20% de los pacientes con la enfermedad de Crohn tienen un familiar que padece de alguna enfermedad inflamatoria intestinal. Recientemente se logró identificar un gen asociado con la enfermedad, sin embargo soló está presente en el 20% de los pacientes que sufren esta condición, por esto es necesario realizar más estudios para definir con certeza que se trata de una alteración de tipo genético.
  • Algunas personas tienen mayor tendencia a reaccionar en forma exagerada ante la presencia de bacterias normales en el intestino, esto constituye un factor de riesgo para el desarrollo de la enfermedad.
  • El tabaquismo acelera los procesos inflamatorios por lo cual se considera un fuerte factor de riesgo.
  • Aunque la enfermedad se puede presentar a cualquier edad, la enfermedad de Crohn usualmente comienza entre los 13 y 30 años de edad.
  • El estrés y la ansiedad pueden ser considerados antecedentes de la enfermedad de Crohn, al igual que ocurre con otras enfermedades inflamatorias intestinales, pero también pueden presentarse como consecuencia de la misma, en especial, durante los episodios severos. 

La enfermedad de Crohn hace parte de un grupo de enfermedades intestinales inflamatorias que presentan síntomas similares, por esta razón para establecer un adecuado diagnóstico se deben realizar varios exámenes que ayudarán a diferenciarla de otras condiciones gastrointestinales. El primer paso consiste en  revisar detalladamente la historia clínica, para esto es importante proporcionar toda la información relacionada con los síntomas y la presencia de este tipo de afecciones en parientes cercanos ya que es más común en personas que tiene parientes en primer grado (madre, padre, hermana o hermano) con enfermedades de intestinales, especialmente intestino irritable.

Después de un examen físico minucioso, el especialista puede ordenar las siguientes pruebas diagnósticas:

Exámenes de laboratorio clínico:

Al evaluar las pruebas sanguíneas, el médico busca signos de anemia, o un conteo alto de glóbulos blancos, que indican inflamación o infección en algún lugar del cuerpo. Usualmente se solicitan las siguientes pruebas cuyos resultados podrían estar alterados durante el curso de la enfermedad.

  • Albúmina
  • Proteína C reactiva
  • Tasa de sedimentación eritrocítica
  • Grasa fecal
  • Hemoglobina
  • Pruebas de la función hepática
  • Conteo de glóbulos blancos
  • Se puede realizar un coprocultivo para descartar otras causas posibles de los síntomas.

Imágenes diagnósticas:

  • Colonoscopía o sigmoidoscopía: durante este procedimiento, un tubo flexible e iluminado (llamado endoscopio) se inserta en el recto y se utiliza para observar el interior del recto y colon. Durante el procedimiento es posible tomar una biopsia (pequeña muestra de tejido) para evaluar el estado del tejido interno.
  • Rayos X con bario (enema de bario o serie gastrointestinal): durante este procedimiento, se toman rayos X del intestino grueso o delgado. El bario cubre la superficie interior del intestino delgado y colon, y aparece en color blanco en la placa de rayos X. Esta característica permite que el médico observe alguna anormalidad.
  • Escáner TAC (tomografía computarizada): Son rayos X del abdomen que resaltan el alcance y la severidad de la inflamación del intestino, así como identificar las lesiones en otros órganos.  

Las opciones de tratamiento para la enfermedad de Crohn tienen como objetivo controlar la inflamación, aliviar los síntomas, corregir las deficiencias nutricionales y lograr mayores periodos de remisión. Para lograrlo se debe seguir cuidadosamente las recomendaciones médicas y tomar los medicamentos formulados que pueden incluir fármacos para el control de la diarrea intensa, el dolor, la inflamación y la fiebre y otros más fuertes para lograr el control de la enfermedad y una efectiva remisión de los síntomas.

Los especialista utilizan fármacos que incluyen aminosalicilatos, corticoides, inmunomoduladores y anticuerpos monoclonales.

Algunas personas con enfermedad de Crohn pueden necesitar cirugía para extirpar una parte dañada o enferma del intestino (resección del intestino). En algunos casos, se extirpa todo el intestino grueso (colon) con o sin el recto.

Recomendaciones Especiales

No se ha demostrado que alguna dieta específica mejore o empeore los síntomas en la enfermedad de Crohn y los problemas alimenticios específicos pueden variar de una persona a otra. Sin embargo, ciertos tipos de alimentos pueden empeorar la diarrea y los gases. Para ayudar a aliviar los síntomas, es importante seguir algunas recomendaciones:

  • Comer cantidades pequeñas de alimento a lo largo del día. 
  • Beber mucha agua (es conveniente consumir cantidades pequeñas a lo largo del día). 
  • Evitar los alimentos ricos en fibra (salvado, frijoles, nueces, semillas y palomitas de maíz). 
  • Evitar los alimentos grasosos o fritos y las salsas a base de mantequilla, margarina y crema espesa. 
  • Reducir los productos lácteos si tiene problemas para digerir las grasas de los lácteos. 
  • Evitar alimentos que causan gases, como las legumbres. 

Es posible que sea necesario ingerir algunas vitaminas y minerales adicionales como suplementos de hierro (si se tiene anemia), suplementos de calcio y vitamina D (para ayudar a mantener los huesos fuertes) y vitamina B12 para prevenir la anemia, consulte con su especialista sobre este tema.

Se debe consumir una alimentación sana y bien balanceada, que incluya suficientes calorías, proteínas y nutrientes de una variedad de grupos de alimentos.

Es recomendable aprender a manejar el estrés y las preocupaciones cotidianas, si requiere ayuda terapéutica comuníqueselo a su médico tratante.

Evitar el consumo de cigarrillo ya que el consumo de tabaco aumenta la probabilidad desarrollar la enfermedad, además, influye de manera desfavorable en la respuesta terapéutica del brote activo de la enfermedad, en la probabilidad de mantener la remisión y en la recurrencia después de la cirugía.

La enfermedad de Crohn puede provocar alteraciones importantes como  infecciones y bloqueos intestinales que de no ser tratados a tiempo pueden comprometer la vida del paciente. Las señales más comunes de estas complicaciones son la presencia de dolor abdominal, fiebre, distensión, náuseas y vómito, ante estas señales de alarma se debe acudir de inmediato a un servicio de urgencias y recibir atención inmediata.

Léase también:

Artículos de Consulta:

  1. Lichtenstein GR, Hanauer SB, Sandborn WJ; Practice Parameters Committee of American College of Gastroenterology. Management of Crohn's disease in adults. Am J Gastroenterol. 2009;104(2):465-483.
  2. García Paredes, J., Taxonera Samsó, C. y Peña, A. S. (2006) (Dirs.) Avances en el manejo de enfermedad de Crohn y colitis ulcerosa. Madrid: Arán Ediciones.
  3. Iglesias, M., Barreiro de Acosta, M., Vázquez, I., Figueiras, A., Nieto, L., Lorenzo, A., & Dominguez-Muñoz, J. E. (2009). Impacto psicológico de la enfermedad de Crohn en pacientes en remisión: riesgo de ansiedad y depresión. Revista Española de Enfermería Digestiva,101, 249-257.
  4. Fry RD, Mahmoud N, Maron DJ, Ross HM, Rombeau J. Colon and rectum. In: Townsend CM, Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL, eds. Sabiston Textbook of Surgery. 18th ed. Philadelphia, Pa: Saunders Elsevier; 2007:chap 50.
  5. Sands BE, Siegel CA. Crohn's disease. In: Feldman M, Friedman LS, Brandt LJ, eds. Sleisenger & Fordtran's Gastrointestinal and Liver Disease. 9th ed. Philadelphia, Pa: Saunders Elsevier; 2010:chap 111.