Lo que necesitas saber sobre las hemorroides

Las hemorroides, es decir las venas dilatadas (varicosas) situadas en el conducto anal constituyen un problema de salud bastante frecuente, que afecta a millones de personas en todo el mundo. Muchas veces pueden pasar desapercibidas o provocar únicamente molestias ocasionales, pero a veces se pueden complicar requiriendo atención especial.

Complicaciones

• La formación de trombos dentro de las venas dilatadas (hemorroides trombosadas)
• La inflamación permanente de esta venas ocasionando dolor intenso y permanente.

En estos casos es preciso eliminarlas mediante la cirugía, que es dolorosa e incapacitante, sin embargo, mediante algunas sencillas medidas generales es posible evitar estos problemas, disminuir la inflamación y frenar la progresión de las hemorroides.

Recomendaciones

Algunas de estas medidas incluyen cambios en la dieta encaminados a reblandecer las heces, los baños de asiento, la aplicación de supositorios, el calor húmedo local y el uso de cremas o geles medicados.

Cambios en la alimentación

El principal factor responsable del desarrollo de hemorroides es el estreñimiento, pues la eliminación de heces duras hace que aumente la presión ejercida sobre la porción distal del intestino y las estructuras localizadas alrededor del ano, lo que incrementa la presión de la sangre en las venas.

Por esta razón, una de las medidas más recomendadas por los médicos es evitar el estreñimiento y la eliminación de heces duras, que a su paso por el recto y el ano pueden irritar las hemorroides. Para ello es fundamental aumentar la cantidad de fibra natural en la dieta, consumiendo frutas, granos y verduras con alto contenido de fibra como pitaya, papaya, pomelo, apio o lechuga, por ejemplo. Así mismo es conveniente tomar una buena cantidad de agua durante el día (al menos 8 vasos) o adicionar una cucharada de salvado de trigo al jugo que se toma con el desayuno.

Baños de asiento

Estos baños son muy útiles para desinflamar el área afectada. Se pueden realizar con agua tibia únicamente o incluyendo infusiones de hierbas como manzanilla o caléndula en un recipiente adecuado o en la tina de baño.

Estos baños son muy útiles para desinflamar el área afectada. Se pueden realizar con agua tibia únicamente o incluyendo infusiones de hierbas como manzanilla o caléndula en un recipiente adecuado o en la tina de baño.
Un baño diario de 10 minutos proporciona bienestar y mejoría rápida cuando las hemorroides están inflamadas.

En tales circunstancias, también se recomienda limpiarse con agua luego de cada deposición y no con papel higiénico, porque éste puede irritar la delicada mucosa que recubre las hemorroides.

Es conveniente aplicar, después de cada baño,  una crema casera a base de vaselina, que se derrite previamente en un recipiente con agua hirviendo y se le puede agregar una cucharada de miel, una clara de huevo, pulpa de aloe vera o sábila y dos cucharadas de harina de cebada, para formar una pasta homogénea.

Supositorios y cremas medicadas

La aplicación de supositorios y cremas medicadas, que contienen anestésicos, agentes astringentes o antisépticos y corticoides (para disminuir la inflamación) es una medida adecuada para aliviar los síntomas (ardor, dolor, prurito); no obstante, se recomienda utilizar las preparaciones que contienen corticoides por un corto tiempo, para evitar que se presenten efectos adversos, en particular la atrofia muco-cutánea.

Véase también:

• Revisión sobre enfermedad hemorroidal
• Fibra para mejorar el estreñimiento
• Consejos para controlar la obesidad
• Sangrado rectal
• Dilatación venosa
• Venas várices