Día mundial sin tabaco: La lucha continúa

El 31 de mayo se lleva a cabo la celebración del día mundial sin tabaco, una iniciativa de la Organización Mundial de la Salud que tiene como objetivo informar al público acerca de los peligros que supone el consumo de tabaco y lo que las personas pueden hacer para reivindicar su derecho a la salud y a una vida sana, al tiempo que protegen a las futuras generaciones.

El consumo de tabaco a nivel mundial sigue disminuyendo: de 1.320 millones de fumadores en 2015 pasó a 1.300 millones, con una previsión a la baja de al menos otros treinta millones para el año 2025. Sin embargo, aún hay mucho trabajo por hacer, especialmente en el despertar de consciencia de las nuevas generaciones y en el control total del fenómeno.

Es importante recordar que el consumo de cigarrillo es uno de los principales factores de riesgo para la mayoría de las enfermedades crónicas, incluyendo hipertensión arterial, infarto agudo del miocardio, trombosis y hemorragia cerebral, enfermedad pulmonar obstructiva crónica y varios tipos de cáncer.

El humo de un cigarrillo encendido o el que exhala un fumador se llama humo de segunda mano y es un factor de riesgo para las personas que se encuentran alrededor, quienes también pueden experimentar los efectos nocivos del tabaco, incluyendo enfisema pulmonar, bronquitis crónica, alergias respiratorias, problemas cardiovasculares y cáncer de pulmón, entre otros.