Insuficiencia arterial (Enfermedad Arterial Periférica)

En la mayoría de los casos, la enfermedad arterial periférica es causada por aterosclerosis. La aterosclerosis consiste en la acumulación progresiva de placas grasas sobre las paredes internas de las arterias, estrechándolas e impidiendo el flujo normal de la sangre.
Este estrechamiento de las arterias también puede, en algunas ocasiones, deberse a fenómenos de compresión mecánica, como cuando un músculo o tendón sale de su posición presionando los vasos sanguíneos o cuando se mantiene una posición durante mucho tiempo.
Tumores, fracturas e inflamación de los vasos sanguíneos también pueden causar enfermedad arterial periférica.

Los síntomas de enfermedad arterial periférica incluyen:

• Adormecimiento y debilidad en las extremidades.
• Calambres en el muslo, la pantorrilla o la cadera luego de un ejercicio moderado.
• Crecimiento lento de las uñas de los pies.
• Dificultad para que cicatricen heridas en los pies.
• Coloración azulosa o pálida en las piernas.
• En los hombres, disfunción eréctil.

Al tratar la enfermedad arterial periférica, el especialista busca controlar las condiciones que la desencadena y prevenir las complicaciones a futuro. Entre los medicamentos recomendados se encuentran:

• Cilostazol: Alivia los síntomas porque ayuda a dilatar las arterias y a evitar que se formen coágulos y placas grasas en su interior.
• Pentoxifilina: Aunque es menos efectivo, es una alternativa al Cilostazol, en especial en personas con falla cardiaca.
• Estatinas: Ayudan a mantener bajos los niveles de colesterol en la sangre. En este tipo de medicamentos encontramos Atorvastatina, Fluvastatina, Lovastatina, Pravastatina, Rosuvastatina y Sinvastatina.
• Anticoagulantes: Son medicamentos que adelgazan la sangre y evitan que se formen coágulos que luego taponen las arterias, entre ellos destacan el ácido acetilsalicílico y el clopidogrel.

Cuando la condición se agrava, puede hacerse necesario hacer intervenciones más profundas y definitivas:

• Angioplastia y revascularización: Por medio de un catéter se llega hasta la porción de la arteria que se ha bloqueado, y con un balón inflable o un dispositivo metálico (stent), se dilatan la arteria para que fluya mejor la sangre.
• “Bypass” arterial: El cirujano ubica la arteria bloqueada y crea un desvío, rodeando la porción de arteria bloqueada. Esto puede hacerse con un vaso extraído de otra parte del cuerpo o con uno fabricado artificialmente.
• Terapia tromboembólica: Por medio de un catéter, el especialista llega al lugar afectado e inyecta una sustancia que disuelva el coágulo, deshaciendo el bloqueo.

Todas las personas que sufren de Enfermedad Arterial Periférica deben hacer cambios importantes de sus hábitos para controlar los factores de riesgo, se recomienda:

• No consumir tabaco.
• Controlar los niveles de colesterol. Esto se puede lograr modificando su dieta habitual para incluir menos grasas en su dieta.
• Controlar la presión arterial.
• Hacer ejercicio. En este caso, el ejercicio debe ser supervisado por el especialista de modo que no vaya a agravar la enfermedad.
• No utilizar ropa muy ajustada, en especial calcetines.

Consulte con su médico.

1. Mayo Foundation for Medical Education and Research (MFMER).Peripheral artery disease (PAD). http://www.mayoclinic.com/health/peripheral-arterial-disease/DS00537. Recuperado Julio 27 de 2011.
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3. Enríquez-Vega E, Calderón-Abbo M, Cossio-Zazueta A et al. Diagnóstico y tratamiento de la enfermedad arterial periférica – Guía de práctica clínica. Instituto Mexicano del Seguro Social. 2008.