Cómo enfrentar el duelo por la pérdida de un ser querido
En algún momento de la vida todas las personas experimentan la pérdida de un ser querido, pero no todas reaccionan de lamisma manera y cada una vive el periodo siguiente a dicha pérdida, denominado duelo, de una manera particular y única.
El tipo de vivencia que significa el duelo depende de diversos factores, de los cuales los más significativos son: la cercanía, tanto emocional como física con la persona fallecida (es decir, si vivían juntos, por ejemplo); si la muerte del ser querido ocurrió súbitamente o era esperada, como ocurre tras un largo periodo de enfermedad; el tipo de relación compartida; la capacidad individual para manejar y expresar los sentimientos; la edad, tanto de quien ha fallecido como de quien lo sobrevive, porque, con frecuencia, para los adultos es más difícil de manejar la muerte de un niño o alguien joven y, por otra parte, a menudo los niños suelen aceptar la pérdida de un ser querido de una forma mucho más natural y pragmática, que las personas mayores.
Ahora bien, ante el dolor por la pérdida de alguien querido, es normal experimentar sensaciones físicas sociales y emocionales. Las reacciones emocionales pueden incluir el enojo, la culpabilidad, la tristeza y la desesperación, las físicas comprenden entre otras, llanto, palpitaciones, dificultades para dormir, disminución o pérdida del apetito, dificultades para concentrarse y cansancio; mientras que, en cuanto a las sociales, algunas reacciones esperadas son el aislamiento, la apatía o el distanciamiento con las personas cercanas.
En general, el duelo es un proceso de adaptación durante el cual, quien lo experimenta pasa por diversas etapas sucesivas, en el transcurso de algunas semanas a varios meses; tales fases comprenden: negación, enojo, negociación y resolución.
Aunque no existen recomendaciones universales y efectivas para sobrellevar el duelo por la pérdida de un ser querido, los expertos aconsejan: reconocer que no se está solo en esta situación; aceptar y buscar el apoyo de familiares y amigos; asumir que el duelo es un proceso que debe vivirse y no tiene sentido tratar de evitarlo o de negar los sentimientos que lo acompañan; y darse un tiempo para vivir el duelo y superarlo.
Así mismo, es conveniente buscar ayuda profesional, de un psicólogo, un psiquiatra o un consejero de duelo, cuando el dolor y la angustia generados por la pérdida son muy profundos, persisten, sin disminuir en intensidad, por varios años o interfieren en forma significativa con el desempeño social/laboral.
Véase también:
- Cómo enfrentar el duelo
- Depresión, un trastorno que afecta más a las mujeres
- Cómo sobrevivir una infidelidad
- Depresión
- Ansiedad
Bibliografía:
- Dealing with death. www.allaboutlifechallenges.org/dealing-with-death.htm
- Helping yourself and others deal with death - HealthyPlace. www.healthyplace.com/depression/articles/helping-yourself-and-others-deal-with-death/
- Mayo Clinic. Dealing with death: confronting painful emotions. www.mayoclinic.com/health/grief/HQ00771
