La ansiedad puede ser muy frecuente en jovenes con dolor abdominal frecuente
El dolor, según la Asociación Internacional para el Estudio del Dolor, se define como “una experiencia sensitiva y emocional desagradable, asociada a una lesión real o potencial de los tejidos”. El dolor es un síntoma experimentado por muchos, sino todos, en algún momento de la vida, que puede variar desde muy leve y corto hasta muy intenso y crónico. Es importante resaltar de la definición, que el dolor es “una experiencia emocional desagradable” y esto se puede ver reflejado en diversas manifestaciones psicológicas. El dolor abdominal, por ejemplo, puede llegar a ser muy intenso e incluso incapacitante, especialmente si es continuo.
El dolor abdominal, comúnmente conocido como dolor de estómago, se manifiesta en el torso, región entre el pecho y la ingle. Existen numerosas causas para el dolor abdominal, como infecciones leves causadas por virus y bacterias, enfermedades del aparato reproductor femenino y algunos tipos de cáncer, entre muchas otras. En cualquier caso, es importante consultar con el médico para descartar una condición que pueda comprometer seriamente la salud (para conocer más acerca del dolor de abdominal, haga clic acá: www.aldiaensalud.com/sintomas/dolor-abdominal).
Cuando hay dolor abdominal frecuente o recurrente, sin cambios en la alimentación, en hábitos intestinales o en ciclos menstruales, se considera que las personas afectadas cursan con una condición llamada síndrome de dolor abdominal funcional o FAPS (por sus siglas en inglés). Este síndrome afecta aproximadamente 12% de la juventud y se asocia a discapacidades importantes desde el punto de vista social, psicológico y académico. De manera específica, se ha reportado que la ansiedad en jóvenes con FAPS podría predecir dolores crónicos y otras discapacidades a largo plazo.
En un estudio publicado en el 2015, se utilizó un nuevo y breve cuestionario dirigido a padres y niños, buscando síntomas psicológicos significativos que pudieran indicar la necesidad de manejo psicológico, dadas las consecuencias de ansiedad a largo plazo en jóvenes con FAPS.
Para los investigadores fue crucial entender cómo los padres percibían la ansiedad, pues son precisamente ellos quienes toman la decisión de iniciar la terapia psicológica en los jóvenes.
Con la herramienta diseñada, se evaluó no solamente la presencia de ansiedad en los jóvenes con FAPS, sino también la severidad del dolor abdominal y el nivel de ansiedad diagnosticado.
En el estudio se reportó que la ansiedad puede estar presente en un 54% de los jóvenes con FAPS. Lo que permitió confirmar la asociación entre la severidad dela ansiedad y el dolor abdominal intenso e incapacitante, más aún cuando los padres y los jóvenes se encontraban de acuerdo con los síntomas de ansiedad, situación que se dio en el 65% de los casos.
Con estos nuevos resultados, se hace un llamado de atención para los jóvenes con síndrome de dolor abdominal funcional, los familiares y los médicos tratantes. Es importante identificar ansiedad significativa en personas con este tipo de dolor abdominal, pues puede ser un factor que influya negativamente en la recuperación que se puede asociar, también, a mayores complicaciones sociales, psicológicas y de desempeño escolar.
