OMS declara a las carnes rojas “probablemente cancerígenas” y a las carnes procesadas “cancerígenas”
El Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (CIIC), el órgano de la Organización Mundial de la Salud (OMS) especializado en cáncer, evaluó la carcinogenicidad de la carne roja y de la carne procesada. Los principales desenlaces del estudio, dados a conocer esta semana por la OMS, afirman que las carnes rojas son "probablemente carcinógenas para los humanos”. Las carnes procesadas fueron catalogadas como "carcinógenas".
Las conclusiones provinieron de una exhaustiva revisión de la literatura científica acumulada a la fecha realizada por 22 expertos de 10 países. Los investigadores clasificaron el consumo de carnes rojas en el grupo 2A, lo que quiere decir que se trata de un producto posiblemente cancerígeno para la especie humana.
Dicha asociación se observó en mayor medida con el cáncer colorrectal; sin embargo, también se han visto relaciones con el cáncer de páncreas y el cáncer de próstata.
La misma revisión de la literatura llevó a los expertos a clasificar el consumo de carnes procesadas en el grupo 1, lo que quiere decir que se trata de un producto cancerígeno; de hecho, declararon que la ingesta de 50 gramos al día aumenta el riesgo de cáncer colorrectal en un 18%.
“Para un individuo, el riesgo de desarrollar cáncer colorrectal por su consumo de carne procesada sigue siendo pequeño, pero este riesgo incrementa con la cantidad de carne consumida”, señaló el doctor Kurt Straif, Jefe del Programa de Monografías del CIIC.
El CIIC decidió examinar los efectos sobre la salud de la ingesta de carne ya que un comité internacional que se reunió en 2014 recomendó que fuera considerada una pesquisa prioritaria.
La recomendación se fundó en estudios epidemiológicos que sugerían que pequeñas elevaciones en el riesgo de varios tipos de cáncer podían estar asociadas a una alta ingesta de carne roja o procesada.
Recordemos que las carnes rojas son aquellas provenientes de mamíferos como res, cerdo, ternera, cordero, caballo o cabra. Las carnes procesadas, por su parte, son aquellas que se han transformado para mejorar su sabor o su conservación a través de procesos como salazón, curado, ahumado y fermentación.
La mayoría de las carnes procesadas contienen carne de res o de cerdo, pero también pueden contener otras carnes rojas, aves, menudencias o subproductos cárnicos tales como la sangre.
El consumo de carne varía mucho de país a país. No obstante, un inmenso número de personas disfrutan de ella, razón por la cual los resultados de este estudio son sumamente importantes para la salud pública.
La ingesta de carne está aumentando de manera considerable sobre todo en los países de ingresos bajos y medianos, por lo que esta información es de particular significancia para ellos.
Si bien los hallazgos apoyan el hecho de limitar el consumo de carnes rojas y procesadas, no hay que olvidar que esta tiene un valor nutricional. Así las cosas, los resultados de la OMS son un llamado para que los gobiernos y los entes reguladores sopesen los riesgos y los beneficios de las carnes rojas y procesadas y así, brinden a la población las mejores recomendaciones dietéticas posibles.
Véase también:
Factores de riesgo para cáncer
Alarmantes datos sobre el colesterol, un enemigo oculto
¿Por qué ir al urólogo?
¿Problemas de próstata? ¿Qué hacer?
Cómo ayudar a reducir el colesterol
Bondades de la pirámide nutricional
Fuentes
Centro de prensa – Organización Mundial de la Salud (OMS). El Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer evalúa el consumo de la carne roja y de la carne procesada. 26 de octubre de 2015.
Por: Redacción Salud. Editores Académicos SAS. Octubre 28 de 2015.