Recomendaciones para dormir bien
Dormir es una función vital del ser humano, y el sueño debe ser un acto reparador que nos ayude a descansar y reponer energía, sin embargo, en algunas oportunidades nos despertamos más cansados, irritables, distraídos, y somnolientos de lo que estábamos antes de dormir, esto puede deberse a problemas con el patrón del sueño.
El patrón del sueño cambia con diversas circunstancias como la edad y las preocupaciones, con respecto a la edad, a medida que pasan los años el sueño se vuelve más liviano, más corto, con despertares nocturnos frecuentes o la necesidad de un mayor tiempo para conciliar el sueño, con respecto a las preocupaciones, en ocasiones los problemas cotidianos, las dificultades laborales, las deudas, discusiones con la pareja y otros inconvenientes quedan rondando en nuestra mente a la hora de dormir y no nos dejan conciliar el sueño.
¿Qué pasa cuando no dormimos bien?
Al no dormir bien nos despertamos ansiosos, no logramos trabajar o estudiar adecuadamente, y es posible que nos enfermemos. Es importante diferenciar los cambios normales debidos a la edad o las preocupaciones de las alteraciones de un insomnio patológico, el cual debe ser estudiado por expertos para determinar sus causas y tratarlo de forma terapéutica.
El ser humano usualmente necesita descansar entre 7 y 9 horas diarias, de esta forma logramos recargar energía, renovar nuestras defensas y preparar nuestro cerebro para una nueva jornada.
¿Qué podemos hacer para dormir mejor?
Existen muchas alternativas positivas que podemos implementar para promover una mejor higiene del sueño, estas generalmente radican en cambios de hábitos o estilos de vida que favorecen el sueño. Algunas recomendaciones generales para mejorar la calidad del descanso son:
- Mantener horarios regulares, tanto para acostarse como para levantarse con un mínimo de 8 horas, para que el sueño logre ser reparador.
- Evitar las siestas durante el día, para que al acostarnos no se prolongue la conciliación del sueño.
- Hacer ejercicio físico durante el día, pero no antes de acostarse por la creencia de que estará más cansado.
- Procurar que la habitación sea cómoda y genere un ambiente tranquilo al dormir, sin ruidos o luces que interfieran con el sueño.
- Utilizar ropa cómoda para dormir que no genere ni frio ni calor excesivo, dependiendo del clima donde nos encontremos.
- Tomar un baño caliente o una bebida caliente antes de dormir son prácticas que pueden ayudar a dormir mejor.
- No comer en exceso antes de dormir, siempre se debe preferir una cena ligera de fácil digestión mínimo dos horas antes de acostarse.
- Evitar el consumo de alcohol, tabaco o cafeína, ya que estos productos pueden estimular la actividad cerebral o provocar ronquidos al dormir.
- Si después de 30 minutos no se logra conciliar el sueño, no es recomendable quedarnos dando vueltas en la cama, leer un libro o ver una película, es una actividad puede ayudarnos a dormir más rápido.
- No realizar esfuerzo físico o intelectual intenso antes de ir a la cama.
- Se puede realizar alguna técnica de relajación con ejercicios de respiración profunda y relajación de los músculos.
- Debemos utilizar la cama únicamente para dormir, no se debe trabajar, ni comer en ella. El dormitorio debe ser un sitio exclusivo para el descanso.
- No debemos llevar preocupaciones a la cama. Es aconsejable dedicar un espacio durante el día para reflexionar y encontrar posibles soluciones a los problemas.
Si a pesar de aplicar estas técnicas, el problema persiste, se aconseja consultar con el médico quien evaluará la situación y podrá ordenar exámenes más especializados para definir la causa del insomnio.
¿Por qué debemos dormir bien?
Recordemos que dormir es muy importante para el buen funcionamiento de nuestro organismo. Mientras dormimos nuestro cerebro consolida y almacena el aprendizaje del día en la memoria, además el organismo desarrolla procesos metabólicos para la respiración celular, la síntesis de energía, la capacidad de concentración, la memoria y el autocontrol, mientras descansamos. Por esta razón sí no dormimos bien podemos enfermar.
Muchos estudios alrededor del mundo han mencionado la relación de los trastornos del sueño con alteraciones psiquiátricas y aumento del riesgo cardiovascular, por lo que esforzarnos por un buen descanso vale la pena.
Véase también:
Fuentes
- Morales, Isabel. Consejos para Dormir Mejor. Clínica Universidad de Navarra. Octubre 2011.Disponible en: http://www.cun.es/area-salud/salud/consejos-salud/consejos-dormir-mejor
- National Heart, Lung and Blood Institute. U.S Departament Health & Human Services. What is Insomnia. March 2012. Disponible en http://www.nhlbi.nih.gov/health/health-topics/topics/inso/
- Hernando, C y Gómez, R. Sueño y ansiedad: recomendaciones para dormir bien. Clínica de la Ansiedad. 2001. Disponible en: http://www.clinicadeansiedad.com/Documento.asp?doc=99