Relación talla-peso
Existen en la actualidad una tablas o curvas de crecimiento que son utilizadas por los médicos pediatras para evaluar el desarrollo de niños y niñas en función de los valores de referencia que son admitidos como normales para niños de una misma edad, género y raza.
Estas tablas de crecimiento, también llamadas percentiles son cuadros de medidas que permiten valorar y comparar el crecimiento de una niña o un niño con relación a un rango estándar. Los parámetros que se miden son estatura, peso y circunferencia de la cabeza y deben ser tomados desde los primeros años de vida.
En 1993, la Organización Mundial de la Salud (OMS) realizó una evaluación sobre las aplicaciones y la interpretación de los patrones antropomórficos (serie de mediciones técnicas sistematizadas que expresan, cuantitativamente, las dimensiones del cuerpo humano.) utilizados hasta ese fecha, concluyendo que dicho patrón de crecimiento no representaba adecuadamente el crecimiento en la primera infancia y era conveniente elaborar nuevas curvas de crecimiento, de tal forma que en 1997 la OMS inició un estudio multicéntrico sobre el patrón de crecimiento (MGRS) con el fin de generar nuevas curvas para evaluar el crecimiento y el desarrollo de los niños en todo el mundo.
Este estudio finalizó en 2003 y se realizó específicamente para elaborar un patrón normal de crecimiento, por esto se seleccionaron niños saludables que vivieran en condiciones favorables para que pudieran alcanzar plenamente su potencial genético de crecimiento. Además, las madres de estos niños debían realizar prácticas fundamentales de promoción de la salud, como alimentar a los hijos con leche materna y no fumar.
De esta se forma la OMS logro logró presentar el primer conjunto de patrones de crecimiento infantil con base en :
- Longitud/estatura para la edad
- Peso para la edad
- Peso para la longitud
- Peso para la estatura
- Índice de masa corporal para la edad
El uso de las tablas de crecimiento es importantes para detectar de forma oportuna algún problema médico que tenga el niño, pues brindan una advertencia oportuna y veraz.
Desde la primera visita al pediatra, deben ser tomadas y registradas las medidas del niño para compararlas con las que se consideran normales o estándar para niños de su misma edad y sexo. De esta forma se podrán detectar alteraciones anormales que puedan significar enfermedades en el niño.
Estos resultados se interpretan como percentiles de promedio y en cualquier cálculo de percentiles, el 50 es la media, esto implica que si el recién nacido se encuentra en un percentil 50, pesa y mide lo mismo que el 50% de los niños de su misma edad y sexo. Es decir estaría en la media, pero si el bebé tiene una estatura en el percentil 75, significa que alrededor del 25% de los niños de la misma edad y sexo son más altos y alrededor del 75% son más bajos en estatura.
Es importante tener en cuenta que todas las líneas de los percentiles corresponden a valores normales, y que dentro de los límites de la normalidad existen niños más pesados y otros más delgados, como niños altos y otros bajos. Lo importante no es tener un percentil alto, sino crecer y subir de peso de forma regular en torno a un mismo percentil.
La medición del peso y la talla se realiza en los controles rutinarios con el pediatra y se pueden presentar los picos de aumento de peso y de crecimiento pero no son siempre los mismos y, durante el primer año, cambian con frecuencia.
Un crecimiento anormal reflejado en las tablas de crecimiento es sólo un indicador de un problema potencial, lo importante es el seguimiento con el pediatra quien determinará si se trata de una alteración real o es condición que amerite un seguimiento cuidadoso. El examen físico, revisión de los antecedentes de enfermedades, hábitos nutricionales, patrones familiares de crecimiento y el conocimiento de las circunstancias psicosociales de la familia, ayudarán a determinar si es necesario realizar estudios adicionales que ayuden a determinar las causas de la alteración.
Alertas
Existen varios indicadores que alertan a padres y médicos sobre la posibilidad de alguna alteración, estos incluyen:
Con respecto al tamaño de la cabeza:
Durante la primera infancia el crecimiento anormal del perímetro de la cabeza puede alertar al médico acerca de alguna alteración ya que:
- Un aumento demasiado rápido del perímetro de la cabeza puede ser indicio de un proceso de hidrocefalia (agua alrededor del cerebro), la presencia de un tumor cerebral u otras condiciones que causen macrocefalia (cabeza anormalmente grande).
- Un aumento demasiado lento puede indicar malformaciones cerebrales, fusión temprana de las suturas (huesos del cráneo) u otros problemas.
Con respecto a la talla y peso:
El aumento insuficiente de peso, estatura o ambas puede indicar un retraso en el desarrollo debido a alguna enfermedad crónica o desnutrición del menor.
Se de estar atenta a las siguientes alarma:
- Si el niño desde el inicio de su vida se encuentra por debajo del percentil 3 o por encima del 97.
- Una bajada permanente y continua de los percentiles.
- Si después de un tiempo de crecimiento lento no existe una recuperación en un periodo prudente de tiempo.
- Si el peso con respecto a la estatura es inferior al P3 o al P97.
- Si se encuentra en uno de los percentiles inferiores o superiores y esta afectado únicamente por el peso (muy delgado o muy obeso) o solamente por la talla (muy bajo o demasiado alto).
Es recomendable que los padres no realicen ellos mismos las mediciones, ya que pueden cometer errores que derivan en preocupaciones innecesarias, por esta razón siempre lleve a los niños a los controles programados en las fechas indicadas.
Véase también:
Fuentes
- Patrones de crecimiento infantil de la OMS Longitud/estatura para la edad, peso para la edad, peso para la longitud, peso para la estatura e índice de masa corporal para la edad
- Chumlea WC, Guo S. Equations for predicting stature in white and black elderly individuals, J Gerontol, 1992; 47(6):197-203
- http://www.webconsultas.com/bebes-y-ninos/creciendo/percentiles/normales-2857