Con frecuencia los hombres que sufren de disfunción eréctil desarrollan problemas de ansiedad y baja autoestima, por esto lo más conveniente es combinar la psicoterapia y el tratamiento farmacológico. Entre los medicamentos empleados, el grupo más conocido es el de los inhibidores de la fosfodiesterasa, al cual pertenece el sildenafil.
No todos los hombres pueden tomar estos medicamentos y de hecho, no se recomiendan en individuos con enfermedades cardiovasculares que reciben tratamiento con nitratos o beta-bloqueadores. Tampoco se recomienda, bajo ninguna circunstancia, combinar estos medicamentos con bebidas alcohólicas, porque pueden presentarse efectos adversos.
Algunas medidas que ayudan a prevenir la disfunción eréctil comprenden: dejar de fumar, reducir el consumo de bebidas alcohólicas, bajar de peso y practicar ejercicio con regularidad.