Cólico menstrual

Existen dos tipos de dismenorrea:

• Dismenorrea Primaria: Se denomina dismenorrea primaria al cólico menstrual que afecta a mujeres sin que estas presenten algún tipo de trastorno ginecológico,   generalmente aparece desde la adolescencia, con las primeras menstruaciones, y en muchos casos disminuye  con la edad o al tener un hijo. 
• Dismenorrea Secundaria: En algunas mujeres, el cólico aparece en una etapa posterior de la vida (después de las primeras menstruaciones), y suele ser más intenso y duradero que el dolor que acompaña los periodos normales,   en estas circunstancias podría tratarse de  una manifestación de ciertas enfermedades como los fibromas uterinos, la endometriosis, los quistes del ovario o la enfermedad inflamatoria pélvica y recibe el nombre de dismenorrea secundaria. En estos casos es importante acudir al médico para un examen ginecológico completo.

La aparición de cólicos menstruales obedece a la liberación de ciertas sustancias (conocidas como prostaglandinas) dentro del útero, las cuales no sólo estimulan los nervios sensibles al dolor sino que provocan contracciones uterinas molestas y doloras. 

Algunas condiciones como la depresión, la ansiedad, la edad (menos de 20 años), el hábito de fumar, la ausencia de embarazos y partos (nuliparidad) y los intentos para perder peso pueden favorecer la aparición de dismenorrea.

El dolor suele comenzar justo antes de la menstruación y por lo general permanece de uno a tres días. A menudo puede acompañarse de náusea, vómito, diarrea, fatiga, migraña o cambios del estado de ánimo.

En caso de dismenorrea primaria, se recomienda combinar  medidas generales como aplicar calor en la parte baja del abdomen, con el uso de algunos analgésicos de venta libre, para calmar el dolor, como los antiinflamatorios no esteroideos (Ibuprofeno, naproxeno, ácido mefenámico, diclofenaco).

En caso de dismenorrea secundaria, el médico tratante podrá formular adicionalmente algunos anticonceptivos orales u otro tipo de medicamentos (danazol, acetato de leuprolide); esto dependerá de la enfermedad de base que se los ocasione.
Algunas recomendaciones generales incluyen practicar ejercicio, utilizar técnicas de relajación (yoga, meditación), acupuntura, ingesta de ácidos grasos omega-3 y ciertas vitaminas (E, B1, B6) que pueden disminuir la intensidad de los cólicos.

Consulte con el médico.

• Sangrado Uterino Disfuncional
• Menopausia
• Amenorrea
• Hemorragia vaginal
• Cólico menstrual
• Endometriosis

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